Estos
días se repiten hasta la saciedad expresiones que aspiran a definir
la realidad tan especial que estamos viviendo. Desde el presidente
del gobierno, hasta un usuario de facebook, pasando por muchos
contertulios televisivos, han repetido como si de un mantra se
tratara, que los médicos son héroes, que estamos todos en el mismo
barco y que hay que volver a la normalidad cuanto antes.
Las
ideas tratan de convertirse en palabras y las palabras en acciones,
decía Chesterton. De alguna forma las palabras que repetimos y
consensuamos están marcando nuestro pensamiento y definirán
nuestras acciones del futuro. Por eso conviene revisar nuestro
lenguaje, reflexionar sobre el horizonte que nos plantea y hacernos
conscientes del compromiso que entraña.
Es
por ello, por lo que, en este momento donde muchas expresiones acaban
siendo consignas que me atrevo a proponer algunos cambios:
Propongo
que no llamemos HÉROES a los que hacen lo que deben.
No
sea que pensemos que ser responsables, es una heroicidad y de esta
forma, llegado el caso, podamos alegar que “no somos héroes”,
cuando tengamos que admitir que “somos unos irresponsables”.
Propongo
que no digamos “VAMOS TODOS EN EL MISMO BARCO”.
Más
bien digamos que “estamos todos en el mismo mar”. Unos van en
yate, otros van con potentes motores y otros con remos; algunos
tienen velas, otros viajan en pateras y algunos van en flotadores;
otros, a nado.
Propongo
que no deseemos VOLVER A LA NORMALIDAD cuando controlemos al virus.
Deseemos, más bien, dadas las circunstancias, declararnos en alerta
permanente hasta que lo normal sea el respeto a la dignidad de todos.
AhoraMQNunca: Promover el diálogo
Moisés Mato
No hay comentarios:
Publicar un comentario