viernes, 30 de abril de 2021
JOSEP BURGAYA, INDEPENDENTISMO EN CATALUÑA, UN POPULISMO DE CLASES MEDIAS. DIALOGANDO CON CATALUÑA
miércoles, 28 de abril de 2021
No quiero acostumbrarme
No, no quiero acostumbrarme.
No quiero acostumbrarme al temor a hablar, porque pierdes el trabajo y la bolsa de comida que podrías recibir una vez al mes (después de varios meses en los caños),…
No quiero que mi conciencia vea normal el contrabando como única alternativa para conseguir un poco de jabón y de pasta de dientes, si no quieres pasar una semana remando para ver si el bono que te ha ofrecido el gobierno te llega para ello…
No quiero acostumbrarme a ver morir enfermos de tuberculosis desatendidos porque no pueden llegar a la ciudad… No quiero acostumbrarme a ver niños, jóvenes y adultos privados de posibilidades de estudiar por falta de cuadernos y demás materiales didácticos, por falta de libros, por falta de salario digno para los maestros…
No quiero acostumbrarme a escuchar todos los días que “los otros son los culpables”, los otros no nos dejan, los otros…
No quiero acostumbrarme a pensar que el corona-virus es el culpable de todo, también de lo que sigue como antes…
Tampoco quiero acostumbrarme a ver la resiliencia de tantas personas:
Quiero gozar de alegría con cada persona que se levanta, con cada intento, con cada suspiro de esperanza.
Quiero soñar de nuevo con cada sonrisa, con cada caricia, con cada esfuerzo.
Quiero que en mi alma se grave a fuego la alegría de esa niña diciendo a su mamá que ya sabe las vocales y la expresión de triunfo de su hermanito mayor diciéndome que él ya sabe leer y escribir.
Quiero seguir emocionándome al ver a dos ancianos paseando por la calle tomados de la mano, enamorados; y al escuchar a esos novios jóvenes soñando como será su familia, su historia de amor.
Quiero quedarme sin palabras ante la belleza de la flor que se alza humildemente completando con su color y su fragancia la sinfonía de la selva y también ante la que crece en la ciudad…
Quiero sentirme uno con el universo en medio de la tormenta y cuando la brisa suave nos abraza…
Quiero estremecerme con cada persona que sueña con una nueva humanidad y comprometerme con cada persona que construye la justicia y la paz desde su estilo de vida y también con aquella que lo hace desde los movimientos sociales y los tribunales…
Quiero gozar con todos los esfuerzos por la reconciliación de personas y pueblos.
Quiero cantar con cada persona que se levanta después de cada caída, intentando ser mejor.
Quiero contar que hoy miles de personas se han reconciliado, que miles de niños nacieron, que cientos de miles de enamorados se besaron (sí, también en cuarentena), que cientos de pueblos siguen organizándose para retomar sus derechos, para recuperar su historia, sus tierras, su cultura, su dignidad…
Hoy, también hoy, como ayer y como mañana, el amor sigue venciendo y engendrando vida en todo el universo.
Quiero contaros lo que ya sabéis: que Dios es Amor y que Él vence siempre, para siempre. ¿No lo veis?
martes, 27 de abril de 2021
Agradecimiento, el gran motor del servicio
Cruz del Encuentro y niña colaborando a Jesús |
Hoy hace seis años que recibí un trasplante de médula. Es día de Agradecimiento por las Dificultades que crean lazos, que nos hacen personas. Cada año por este día de manera especial me acuerdo de los sanitarios. Es lógico. Investigadores, limpiadores, enfermeros, médicos... hombres y mujeres, y toda persona que cuida o colabora con el cuidador mediante el transporte, la gestión, la producción y tantas cosas.
de mirada limpia,
de no tener razón,
de adelantarse a su tiempo.
Vocación
de no saber calcular en el amor.
Él, también -antes- el donnadie,
Tú, también -antes- el distinto,
yo también, pero no primero.
Ustedes, los últimos primeros.
Ellos, todos, los peores delante.
El amigo que soñamos
realmente no tiene Vocación,
es tan no-teniente
que no tiene vocación,
ES Vocación.
Es vocación,
como el avance,
como el amor.
Como nosotros es mucho mas que yo.
Es vocación de amor
vocación de amor.
Vocación
de nunca parecernos bastante
la solidaridad,
Vocación de entender,
de aguantar,
de soltar amarras,
de ser tarea, misión.
Porque ganar ganando
tal vez una mirada herida
quiza un rencor manifiesto
¿una poltrona?
¿una grieta de hormigón?
Perder es amar,
perder es parir,
perder es correr,
perder es servir.
Salir del ombligo,
caminar mas allá,
meditar más a fondo,
entrar mas dentro,
Ganar es morir
Escuchar el viento,
fecundar el espacio,
sembrar el tiempo.
Llorar escuchando,
sentir viendo,
morir siendo,
caer subiendo,
volar amando,
dialogar muriendo,
gustar viviendo.
Tener poco: lo que no nos posea.
Poder poco: lo que no nos pueda.
Placer poco: lo que no nos ate.
Para tenerlo todo en común.
Para poderlo todo en común.
Para placerlo todo en común.
Hasta poseer la belleza,
poder la bondad,
gustar la verdad,
saber para servir,
poder para igualar,
fuerza para gastarse,
esperanza para perder
Perder yo, para ser,
Perder siempre
para que gane el futuro,
para que ganen los vencidos,
para que gocen, de verdad,
por fin,
los -pobres también- vencedores.
Hasta ese día final no quiero vencer.
No podemos, no queremos.
El que vence se aleja de los pobres
y de los pacificadores
Se aleja de la belleza,
y de la verdad que habita raso,
y de la esperanza que vuela alto.
Vocación de perdedor...
solo se puede en Común,
vocación es de los que luchan.
El amigo que sueño,
el amigo que soñamos,
no lo busco, me tiene.
Nos tiene. Nos busca. Nos ama.
Se pierde, se vuelca, se lanza
El amigo que me tiene,
que nos tiene,
forja lazos
mientras le buscamos.
El amigo que nos tiene
es un cuerpo.
Los amigos que nos sueñan,
que nos aman,
que nos nos quieren,
mientras mueren
nos abrazan.
Son abrazo,
se destrozan,
se encuentran.
Encontrándose se pierden
y al perderse se encuentran.
ESPAÑA PAGA PASAR LAS CONCERTINAS A MARRUECOS
José Palazón
Marruecos y África se desangran en el mar. Sellar las fronteras no es ningún mérito que se deban atribuir ni Marruecos, ni España, ni compartir. La responsabilidad de tanta muerte es de las políticas comunes de los dos países.
No son muertes naturales, son crímenes organizados.
lunes, 26 de abril de 2021
COVID19 a diálogo: Jose R. Loayssa y Amós García
domingo, 25 de abril de 2021
VENCEREMOS
Leo que la melodía se parece a la de una antigua canción de marineros de Sicilia que en Alemania se usó para cantar un himno protestante y de allí pasó a América donde a principios del s.XX se cantaba como el himno "I Will Overcome" de un reverendo hijo de esclavo. De la Iglesia la melodía, con su nueva letra gospel, vuelve al trabajo y a las calles, en el combate contra la segregación racial. La versión actual se debe a dos mujeres valientes de aquella América de los 40, por las que llegó a oídos del cantante Pete Seeger.
miércoles, 21 de abril de 2021
martes, 20 de abril de 2021
miércoles, 14 de abril de 2021
Diálogos con Antonio Turiel tras la lectura de "Petrocalipsis"
lunes, 12 de abril de 2021
Otro mito: La INACABABLE sucesión de terribles OLAS
Una de las formas de mantener la tensión social y el miedo ha sido las continuas advertencias de que una NUEVA OLA era inminente. Si uno mira el exceso de mortalidad en el conjunto de España se aprecian tres `periodos con un aumento significativo de la mortalidad. Pero es un efecto producido porque las comunidades autónomas han seguido una evolución no acoplada de la difusión (el clima es una razón pero no la única). Ha habido dos ondas una en primavera y otra en Otoño – invierno con menos impacto. Pero a nuestros políticos le interesan asustar y desinformar, es su profesión.
viernes, 9 de abril de 2021
Entrevista a Francisco Puñal. Humanizar las Despedidas con COVID19
jueves, 8 de abril de 2021
Mascarillas en la playa, mascarillas en el monte. ¿En serio?
Esta mañana escuchaba la última clase del estupendo curso que estoy haciendo sobre Ecología de la Infancia (más información aquí: https://saludmentalperinatal.es/formacion-ecologia-infancia/), sobre la importancia del canto en la infancia... y he recordado lo importante que es la música para mí.
Así que me he decidido a no escribiros, sino a cantaros lo que pienso. Y para eso me voy a ayudar del maravilloso mundo de YouTube.
Aquí va la primera canción:
Porque como dice la sabiduría popular, quien canta, sus males espanta...
Porque tenemos hijos e hijas, porque tenemos sobrinos y sobrinas, alumnas y alumnos... que necesitan nuestro canto tanto o más que nosotras mismas...
Porque en éste mundo pandémico, en el que todos los gobernantes parecen haberse olvidado de las criaturas, en esa noche del olvido y de la violencia absurda de cerrarles los parques, de ponerles mascarillas que no necesitan, de impedirles el juego, sólo puede salvarles nuestra mano, nuestra esperanza.
miércoles, 7 de abril de 2021
Campaña por la Justicia en la recogida de la fresa en Huelva
Ana Pinto
Nuestra compañera Fátima tenía un contrato laboral y fue abandonada por empresarios e instituciones. Tenía 37 años cuando murió de cáncer en diciembre sin más acompañamiento que la solidaridad de sus compañeras jornaleras. Ella era una jornalera marroquí contratada bajo la regulación de la orden Gecco de contratación en origen. Su historia es una evidencia más de que los convenios y los acuerdos son vulnerados sistemáticamente, dejando, en este caso, a una trabajadora contratada sin baja laboral que la proteja en tiempos de enfermedad.
Su caso, por desgracia, no es único. Las vulneraciones de derechos en el campo son vox populi. Trabajo a destajo sin días de descanso, viviendas sin medidas de seguridad ni higiene en plena pandemia, agresiones verbales y amenazas por parte de los empresarios, trabajadoras sin contratos, contratos con salarios por debajo de convenio y un sinfín de ilegalidades y vulneraciones. Así es como se cuida a las personas que trabajan en el campo en España, siendo éste un trabajo esencial.
Me llamo Ana Pinto y pertenezco al colectivo de Jornaleras de Huelva en Lucha. Tras años trabajando como jornalera, decidimos auto-organizarnos para luchar por los derechos de todas las personas que trabajábamos en el campo y por una vida digna. Las inspecciones laborales y los planes enfocados a mejorar la situación son claramente insuficientes. Mientras las instituciones dicen que aquí está todo bien, nosotras vemos día a día cómo se vulneran los derechos de las trabajadoras.
Por eso, quiero pedirte tu firma para exigir un plan de monitoreo y control que de verdad proteja los derechos humanos, civiles y laborales de quienes trabajamos en el campo. Queremos pedirle a Yolanda Díaz que nos escuche y ponga en marcha el plan que proponemos.
Actualmente hay un plan vigente llamado Prelsi Interfresa que está gestionado por las mismas empresas de la fresa. Siendo el Prelsi una herramienta de monitorización de lo que ocurre en los tajos pagada con dinero público, creemos que debería tener un carácter independiente y ser gestionado por entidades cuya responsabilidad e imagen no estén relacionadas con el negocio de los frutos rojos. Queremos que esta labor de monitoreo y vigilancia por los derechos de las trabajadoras sea llevada a cabo por organizaciones independientes y que las empresas de la fresa estén obligadas a permitir el acceso a los tajos y a las trabajadoras por parte de las organizaciones que velamos por los derechos de las jornaleras.
Con este plan, que aportaría transparencia a lo que ocurre en los tajos, daríamos un gran primer paso para parar los abusos y vulneraciones de derechos que sufren las personas que trabajan en los campos de Huelva.
Nosotras desde la auto-organización feminista y antirracista y el apoyo mutuo seguiremos creando redes y luchando por una vida y un trabajo dignos para todas las personas que trabajamos en el campo. Ayúdanos a tejer también redes con las instituciones para poder, de esta manera, crear soluciones más sólidas y sostenibles, para seguir trabajando por un mundo más justo. Con tu firma le mostraremos a Yolanda Díaz que somos muchas las que creemos indispensable mejorar las condiciones de las trabajadoras esenciales de los campos en España. Si quieres apoyarnos aún más entra en www.jornalerasenlucha.org
domingo, 4 de abril de 2021
Escuelas de lujo, aplicaciones de citas o taxis para perros: el gran negocio de humanizar las mascotas
Stich tiene tres años y vive en Nueva York. Su educación cuesta 200 dólares (169 euros) semanales y su alimentación, 60 dólares al mes (50 euros). Todos los días a las 19.00 lo pasa a buscar alguien al que se le paga para que lo pasee, y tiene más juguetes que los que tuvo su padre de niño. Stich es el perro de George Tsoy, de 22 años, y su compañera de piso. “Es nuestro pequeño hijo, lo tratamos como a una persona de verdad”, comenta Tsoy, de visita en Washington. El mercado de mascotas está en efervescencia. Estados Unidos es el país que más desembolsa per capita en el cuidado de sus compañeros domésticos. En 2020, el gasto total rozó los 100.000 millones de dólares (85.000 millones de euros), el doble que hace una década, en gran parte debido a los mileniales, que lideran esta suerte de humanización de las mascotas.
Casi la mitad de los estadounidenses destina alrededor de 3.400 dólares anuales en atender las necesidades de sus perros, según una encuesta de Rover, la mayor red mundial de cuidadores y paseadores de estos animales. Otros gastan más. Mucho más. Entre las excentricidades que tienen a la locomotora del consumismo a toda máquina figuran aplicaciones de citas, televisión o servicio de taxis. Todo para perros. Nueve de cada 10 dueños consideran a sus mascotas como parte de la familia, revela el informe La humanización de las mascotas (2019). En este escenario aparecen cada vez más empresas que organizan desde bodas y cumpleaños, hasta la ceremonia judía del bark mitzvah.
Ana Clara Muñoz, de 30 años, cursa una especialidad en psiquiatría para mascotas en la clínica veterinaria de la Universidad de Carolina del Norte, donde dan un diagnóstico médico al perro, a veces recetan antidepresivos y ansiolíticos, y elaboran un plan de modificación conductual. Muñoz sostiene que la “humanización” de los perros ha mejorado la salud de estos, debido al excelente cuidado que reciben, pero que puede ser negativa cuando se les obliga a hacer cosas que los alteran, como, por ejemplo, una sesión de fotos. “Los mileniales nos estamos esperando más a tener hijos ahora que tanto mujeres como hombres trabajan, y tener una mascota cumple la necesidad de cuidar a un ser. Además, el gasto de tener un perro es muchísimo menor al de tener un hijo”, apunta la veterinaria que atiende principalmente jóvenes, pero también jubilados que ya no viven con sus hijos y ahora tienen “perrhijos”.
Grandes marcas
En los pasillos de una sucursal de Petco, la segunda cadena de tiendas de mascotas más grande de EE UU, en la capital del país, venden comidas de “calidad humana” que van desde preparados de venado y calabaza, hasta un paquete de snacks de brisket (pecho de vaca) a 29,95 dólares los 140 gramos. También mascarillas para la pandemia, chubasqueros o botas para el frío por 60 dólares. Este tipo de vestuario está pensado para el público masivo, pero la oferta de lujo también se abre paso. Diseñadores de renombre fabrican ropa y accesorios para perros. Louis Vuitton, por ejemplo, ofrece un collar de cuero con placa por 345 dólares. La correa, por 480 dólares, se vende por separado.
El dependiente de la tienda de Petco comenta que durante la pandemia ha visto dispararse la venta de sus productos en línea. El auge responde a los hábitos de compra de los mileniales —o padres de mascotas, como varios se autodefinen—. La venta de accesorios registró un alza de un 21% en 2020, alcanzando casi 800 millones de dólares, cuatro veces la tasa de crecimiento de 2019, según el informe Suplementos para mascotas en EE UU. La mitad de los suscritos a empresas de productos para mascotas en línea tiene menos de 40 años. “Mi mamá tenía 18 años cuando tuvo su primer hijo y yo tengo 22 y no creo que tenga hijos hasta los 40. Queremos asumir una pequeña responsabilidad por alguien, pero no tanta como una persona”, explica Tsoy.
Manuela Tironi, de 28 años, se mudó desde Chile a Washington justo antes de que se desatara la pandemia. Con un trabajo de media jornada, el aburrimiento la impulsó a bucear en el mundo de los paseadores y cuidadores de perros. Se creó un perfil en Rover y en seis meses sus ganancias mensuales rozan los 2.000 dólares, superando su salario de abogada en su país de origen (donde el coste de vida es significativamente menor). Sus amistades que se dedican únicamente a este negocio ganan 3.800 dólares al mes, comenta por teléfono.
“Pensé que como estaban todos encerrados no iban a requerir el servicio, pero sorprendentemente hay mucha demanda. La gente aquí viaja mucho y dejan a sus mascotas solas”, explica Tironi. Comenzó cobrando 13 dólares por un paseo de media hora y ahora ya va por 20, y cerró su perfil debido a la cantidad de clientes fijos que logró cosechar. Prácticamente todos son jóvenes. En Estados Unidos hay más hogares con mascotas que con menores de edad. Aproximadamente un tercio de esos dueños son mileniales, según la Asociación de Productos para Mascotas de EE UU (APPA, por sus siglas en inglés).
Además de paseos, Tironi ofrece cuidar a las mascotas por una noche (50 dólares) o hacerse cargo durante el día. Para los que no quieren contratar a un cuidador, existe la opción de las guarderías. Una de las más famosas en Washington es District Dogs. Los perros pueden llegar a las instalaciones en un “bus escolar de perros” y, de 9.00 a 19.00, participar de las clases de “buenos modales”, jugar con sus compañeros en las suites, relajarse en el spa o recibir una limpieza completa, desde recorte de uñas hasta vaciado de las glándulas anales. El coste mensual solo por el servicio de guardería es de 631 dólares. Ahora bien, si el dueño quiere darle una enseñanza menos convencional, hay colegios Montessori para perros como el Patrick’s Pet Care, cuyo coste mensual supera los 1.200 dólares.
El mayor desembolso anual de los dueños se va en veterinarios (426 dólares), seguido por la comida (259), según APPA. Pamela, de 65 años, compró a Teddy cuando era un cachorro, en octubre de 2019. El primer año desembolsó 1.000 dólares en el veterinario y otros 500 en cuatro sesiones de entrenamiento. Como el perro sufre de problemas intestinales, le compra comida especial, por un valor hasta tres veces superior a los alimentos corrientes. “Es muy costoso, pero es menos que lo que cuestan cuatro años en Harvard”, apunta entre risas en la calle. Su marido y ella no tuvieron hijos. “Este es nuestro hijo”, dice, apuntando al animal de pelo gris, perfectamente recortado e impecable, mientras espera que su dueña le compre, como hace cada día, una golosina canina.
Para ver interesantes gráficos (pinchar aquí)
sábado, 3 de abril de 2021
NOMADLAND (Estados Unidos, 2020) de Chloé Zhao. Más allá de los límites
El filme tiene muchos momentos que parecen puro reportaje. Vemos lugares de trabajo (el almacén de Amazon, restaurantes de carretera, campings…) así como un gran número de gente nómada y real que se interpreta a sí mismos, con encuentros, incidencias y percances que no parecen ensayados. Los grandes paisajes muchos de ellos nevados y contemplados al atardecer, corroboran esa sensación de verdad y realidad que nos presenta esta espléndida película.
La mirada que vierte su directora sobre los personajes de esta historia es una mirada llena de amor hacia los más pobres y hacia los excluidos y los presenta en el fondo como verdaderos héroes esforzándose por su supervivencia y tratando de encontrar su lugar en el mundo. A la vez un gran hálito de sentido de la trascendencia se nos muestra muchas veces a través de pequeños y sencillos objetos (un plato, un mechero, una rueda pinchada) que parecen vivir ya la eternidad a la que los mismos personajes se sienten llamados. El filme entonces se llena de una gran poesía, planteando en todo momento unas situaciones llenas de lirismo cómo puede ser la escena del diálogo con el joven adolescente que se ha ido de casa.
Su protagonista, con su presencia continua en pantalla, incita al espectador a entrar en un relato en primera persona que deriva en testimonio de una forma de vida que, aunque parece frustrante, está sin embargo llena de sentido y de los grandes valores que hacen al ser humano crecer: la esperanza, la solidaridad, la generosidad, la fraternidad, la confianza en la Providencia, y la conciencia de la limitación. Estos nómadas, todos con heridas íntimas, centran en el viaje lo que ellos desean: no poseen una casa, sus furgonetas, tiendas y caravanas son su hogar. Entonces la vida humana es como un camino en donde todos aquí y allá si podrán encontrar. “Nos vemos en el camino” dice uno de ellos, en un camino que habría que escribir con mayúscula. Hay escenas memorables, como es el dialogo con el líder de los nómadas, que cuenta su tragedia de haber perdido un hijo y la hermosa alternativa que adopta ante eso, o el homenaje en la hoguera nocturna a una compañera ya muerta. “Nomadland“ está dedicada “a todos los que partieron”.
“Nomadland” desprende una gran melancolía pero también una fuerte esperanza. Ese sol moribundo y rojizo en el horizonte nos indica la precariedad de la vida humana pero también su inmensa belleza, su gran dignidad. La frontera no es un muro sino una ventana a otro mundo. El viaje es entonces el estimulo de búsqueda, no para ver el mundo, sino para entrar en lo invisible. Como decía San Juan de la Cruz “Viajamos no para ver si no para no ver “.
AHORA MAS QUE NUNCA: Caminantes
José Luis Barrera Calahorro, 23 de marzo de 2021.